Cómo evitar la piel seca

Nos quedan menos de 20 días para inaugurar el tan esperado verano. Y con él, vienen las preocupaciones por estar estupendos, lucir tipazo y piel de anuncio. Vamos, que ahora son fechas de agobiarnos por nuestro aspecto cuando hemos tenido todo el año para preocuparnos. Pero somos así, todo a última hora. ¡Qué le vamos a hacer! Así que hoy hemos decidido hablaros sobre algunos truquitos para evitar la piel seca y lucir una tez de envidia este verano en la playa.

1. Cremas y ungüentos caseros

Aunque existen cantidad de cremas hidratantes que puedes comprar y que te irán fenomenal, también existen muchos remedios caseros que te puedes hacer en casa. Como por ejemplo, una crema de aceite de oliva y yema de huevo que también puedes aplicarte en el pelo. En verano entre el cloro de las piscinas y la sal del mar, nuestro cabello, al igual que la piel, se ve resentido. Con este ungüento verás como no tienes ningún problema de hidratación. Y además, ¡es súper fácil y económico!

2. Ducha

Aunque no lo creas, la calidad del agua de tu hogar tiene mucho que ver con la salud de tu piel. Las aguas duras que tienen mucha cal, resecan la piel y provocan la aparición de caspa. Por eso es tan importante que valores la posibilidad de instalar un descalcificador o equipo de ósmosis inversa en casa. Además de que notarás la piel mucho más suave e hidratada, también notarás el ahorro en jabones, champús y suavizantes. Tanto a la hora de ducharte, como a la hora de lavar ropa. Y es que el agua pura y de calidad que te pueden proporcionar estos sistemas, está libre de residuos y bacterias que afectan a la cantidad de espuma que genera cualquier tipo de jabón o producto de limpieza.

Aparte de esto, ten en cuenta que si te duchas a diario, y en verano seguro que sí, es importante que no estés en la ducha más de 15 minutos. De la misma manera que tampoco es recomendable ducharse más de una vez al día. Porque de lo contrario, eliminaremos la capa de grasita que genera nuestra piel y provocaremos tener una piel más seca y tirante.

Si usas esponjas de baño o cepillos para limpiarte la espalda, ¡deja de usarlos! O por lo menos si los usas, que sean lo más suaves posible. Ya que al rascar la piel, además de eliminar la capita de grasa que nos ayuda a mantener una piel sana e hidratada, nos elimina la humedad. ¡Ah! Y a la hora de secarte, no frotes como si estuvieras fregando los platos. Coge la toalla y ve secándote suavemente.

3. Después de la ducha

Bien después de la ducha, o bien durante, lo que es un remedio infalible contra la sequedad de la piel es aplicarse alguna crema o ungüento hidratante. Como por ejemplo el remedio casero de mezclar aceite de oliva con yema de huevo que comentábamos antes.

Con seguir estas indicaciones, tendrás más que suficiente para lucir una piel sana e hidratada este verano. ¡Eso sí! No te pases con el sol, que además de que puede ser muy perjudicial para la salud, reseca muchísimo la piel. Y total, eso de estar como un tizón, ya no está de moda. Y bebe, bebe mucho, que con tanto calor nos deshidratamos y tu piel también lo notará.