El agua embotellada no es sostenible, se mire como se mire

¿Sabes cuántas botellas de agua de 1 litro se consumen de media en el mundo? Nada más ni nada menos que 250.0000 millones. Sí, es una barbaridad, un uso excesivo de plástico que, además de ser un negocio, está contaminando nuestro planeta. España es, además, uno de los países líderes en consumo de agua embotellada y de producción, según datos de la Asociación Nacional de Empresas de Aguas de Bebida Envasadas (ANEABE).

Aun así, cada vez son más los consumidores, asociaciones, ecologistas, empresas y gobiernos que están luchando por erradicar el plástico. Un ejemplo es la cadena de supermercados española Supersano, que a finales del 2018, anunciaba que dejará de vender agua embotellada en sus tiendas.

En Iagua hacen un cálculo aproximado del uso de botellas de plástico en plenos de ayuntamientos de toda España. Si hay 8.125 municipios, y de media se celebran 4 plenos al año con al menos 6 personas, y cada una consume 1 botella de usar y tirar, ¡son 195.000 botellas de plástico anuales! Además, en algunas ciudades de Estados Unidos, India, Australia y Canadá, ya tienen ciudades que han prohibido el uso de botellas de plástico. Y cada vez son más.

Desde Irima Fontanilla queremos concienciar a la población de la importancia de reducir el uso de plástico, puesto que a nuestro alcance existen otras alternativas como el agua de grifo. Y es que las ventajas de beber agua de grifo respecto al agua embotellada son muchas, repasemos cuáles son las principales:

• Es más ecológico: sin duda el plástico es uno de los grandes problemas de nuestro siglo y cada vez son más las personas, asociaciones, ecologistas, empresas y gobiernos que dan el paso por erradicarlo. Si dejáramos de consumir (y por tanto producir) el plástico de las botellas que bebemos, libraríamos a nuestro planeta de millones de toneladas de plástico de un solo uso. Asimismo, si bebemos menos botellas de agua, reduciríamos el transporte de las mismas por carretera y, por tanto, se emitiría menos CO2 a la atmósfera.
• Es un bien básico: el acceso al agua potable es derecho fundamental. Teniéndolo al alcance, ¿por qué no utilizarlo?
• Es más económica: aproximadamente, 70 céntimos por cada 1.000 litros de agua del grifo, y una botella de agua te cuesta de media unos 50 céntimos cada 1,5 litros. Increíble, ¿verdad?
• Es más saludable: las botellas de plástico contienen elementos químicos que con el paso del tiempo se liberan en el agua que contienen, y acabamos bebiéndolo.

Y es que, ¿por qué solemos pensar que el agua de botella es menos saludable que la de grifo?  Desde el laboratorio Dr. Oliver Rodés, que analizan análisis químicos y microbiológicos del agua en España desde 1902, indican que “toda agua de consumo humano de la red pública es potable, y por tanto saludable, la legislación así lo exige”. https://www.lavanguardia.com/comer/materia-prima/20190124/454256116934/agua-errores-agua-grifo-agua-embotellada.html

Para utilizar el agua de grifo, mejorar el sabor, reducir la cal y otros residuos, existen además múltiples soluciones como filtros, descalcificadores, sistemas de ósmosis o fuentes de agua. ¿Quieres información sobre estos productos, su funcionamiento y ventajas? ¡Pregunta al equipo de Irima Fontanilla!