Ya llegó el verano, y con él las altas temperaturas y los termómetros disparados. Además este año, todo apunta que va a ser más caluroso de lo normal. Según la Agencia Estatal de Meteorología, la previsión es que, para los meses de verano, las temperaturas estén entre 0,5 y 1 grados por encima de la media de referencia. La mejor manera de combatirlo es… ¡irse de vacaciones y darse un chapuzón! Pero si eres de los que les toca trabajar durante los meses más calurosos del verano, y quedarse en la oficina, tenemos una solución menos placentera pero igual de necesaria: la hidratación.
Una de las maneras que tenemos de beber más agua, y sobre todo en esta época en la que el riesgo de deshidratación aumenta, es instalando dispensadores o fuentes de agua en las oficinas. Será más fácil que bebas agua, ésta será de calidad, respetarás el medio ambiente al no gastar botellas de plástico y, lo más importante, podrás regular la temperatura del agua y tenerla bien fresca.
Y es que es imprescindible beber agua a diario, ya que este gesto a priori tan simple aporta bienestar y saluda nuestro organismo. Gracias al agua hidratamos nuestro cuerpo y nuestro cerebro, órgano imprescindible si queremos concentrarnos, rendir en la oficina y trabajar con normalidad. Tener dispensadores en la oficina tiene múltiples beneficios, entre los que destacan:
Si aún estás pensando en instalar o no dispensadores o fuentes de agua en tu oficina, llama a nuestro equipo de Irima Fontanilla. Realizaremos un estudio de qué sistema se adapta mejor a tus necesidades según número de trabajadores y presupuesto. Además de comercializar estos dispensadores y fuentes de agua, nos encargamos del mantenimiento, reparación y conservador de los mismos.
Además, si no quieres comprar la máquina al completo, puedes adquirirlas en renting o alquiler. ¡Contacta con nosotros y te asesoramos de forma gratuita!